
Test de intolerancia lactosa en Córdoba
La intolerancia a la lactosa es la incapacidad del organismo para digerir la lactosa, un azúcar presente en la leche y sus derivados. Esto ocurre cuando el intestino delgado no produce suficiente lactasa, la enzima encargada de descomponer la lactosa en azúcares simples (glucosa y galactosa) para su absorción en el torrente sanguíneo. Detección de intolerancia a la lactosa con servicio de asesoramiento nutricional
El diagnóstico se realiza mediante un test de intolerancia a la lactosa, como el test de hidrógeno en el aliento o la prueba de tolerancia a la lactosa en sangre. Aunque no tiene cura, el tratamiento consiste en ajustar la dieta, reducir el consumo de lácteos o utilizar productos sin lactosa y suplementos de lactasa.

Prueba de intolerancia a lactosa en Córdoba
Si sospechas que puedes sufrir intolerancia a la lactosa, ahora tienes una solución rápida y efectiva en Córdoba. Gracias a nuestro Test de Intolerancia a la Lactosa, podrás realizarte la prueba en cualquiera de los laboratorios Synlab y, posteriormente, recibir una consulta médica especializada de forma presencial en Córdoba o de manera online, según tu preferencia.
¿En qué consiste el test de intolerancia a la lactosa?
El test mide la capacidad de tu organismo para digerir la lactosa, el azúcar presente en la leche y sus derivados. Se realiza mediante un test de hidrógeno en el aliento o una prueba de tolerancia a la lactosa en sangre, ambas técnicas seguras y avaladas por profesionales médicos.
Si tienes síntomas digestivos recurrentes, no esperes más. Reserva tu test y consulta hoy mismo para encontrar la mejor solución a tu problema intestinal.

Requisitos previos para realizar el Test de intolerancia de lactosa
Restricciones dietéticas previas al test
Ayuno de 8 a 12 horas: No debes comer ni beber (excepto agua) durante las horas previas a la prueba.
Evitar antibióticos y probióticos: No tomar estos medicamentos al menos 2 semanas antes, ya que pueden alterar la flora intestinal y afectar los resultados.
No consumir lácteos ni derivados: Desde la noche anterior al test, evita leche, quesos, yogures y otros productos que contengan lactosa.
Evitar bebidas carbonatadas y azúcares fermentables: No consumir refrescos, chicles, alcohol ni alimentos con alto contenido en fibra el día previo.
No fumar ni hacer ejercicio intenso: Evitar estas actividades al menos 2 horas antes de la prueba, ya que pueden influir en los niveles de hidrógeno en el aliento.
Consideraciones generales antes del Test de intolerancia lactosa en Córdoba
El test se realiza en ayunas por la mañana.
Se sopla en un tubo o bolsa especial antes y después de ingerir un azúcar específico (glucosa o lactulosa).
Se deben tomar muestras de aliento cada 15-20 minutos durante aproximadamente 2-3 horas.
Preguntas frecuentes sobre test de intolerancia lactosa
El test incluye una consulta presencial o consulta online mediante videollamada de 30 minutos para interpretar los resultados y, según estos, valorar el tratamiento que mejor se adapte al paciente.
Personas con sospecha clínica de este trastorno que presenten alguno(s) de los siguientes síntomas: dolor o hinchazón abdominal, gases, diarrea, náuseas o vómitos, ente otros, vinculados al consumo de productos lácteos o derivados que contengan lactosa.
✅En el caso de los niños, no hay una edad mínima establecida para la realización de la prueba, siempre y cuando se pueda asegurar la ingesta de toda la solución de lactosa (en un plazo máximo de 10 minutos) y el correcto cumplimiento del procedimiento de toma de muestras.
Existen diferentes tipos de intolerancia a la lactosa:
Primaria: Es la más común y ocurre cuando la producción de lactasa disminuye con la edad.
Secundaria: Aparece como consecuencia de enfermedades intestinales (como celiaquía o Crohn) o tras infecciones gastrointestinales.
Congénita: Muy rara, ocurre cuando un bebé nace sin la capacidad de producir lactasa.
Las personas con intolerancia a la lactosa pueden experimentar síntomas digestivos entre 30 minutos y 2 horas después de consumir productos lácteos, como:
Hinchazón abdominal
Gases o flatulencias
Diarrea
Dolor o calambres estomacales
Náuseas