
Test de intolerancia a la fructosa en Córdoba
La intolerancia a la fructosa es un trastorno digestivo que impide la correcta absorción de este azúcar presente en frutas, miel, algunos vegetales y productos procesados. Cuando el intestino no puede digerir adecuadamente la fructosa, se generan síntomas digestivos como; Hinchazón abdominal, gases, dolor o calambres estomacales, diarrea o estreñimiento etc..
Test de intolerancia a la fructosa en Córdoba en laboratorio
Accesibilidad y comodidad – Realiza el test en cualquier laboratorio Synlab sin largas esperas.
Consulta médica especializada – Recibe asesoramiento profesional con un especialista.
Opciones flexibles – Consulta médica presencial en Córdoba o online, según tu disponibilidad.
Resultados fiables – Métodos clínicos avalados científicamente.

Prueba de intolerancia a la fructosa en Córdoba
Si crees que podrías tener intolerancia a la fructosa, ahora tienes la posibilidad de obtener un diagnóstico preciso en Córdoba de forma fácil y accesible. Con nuestro servicio, puedes realizar el Test de Intolerancia a la Fructosa en cualquier laboratorio Synlab y, luego, consultar con un especialista, ya sea presencialmente en Córdoba o a través de una consulta online.
¿En qué consiste el test de intolerancia a la fructosa?
El diagnóstico se lleva a cabo mediante un test de hidrógeno en el aliento, en el que se mide la cantidad de hidrógeno exhalado tras ingerir una solución con fructosa. Un aumento anormal del hidrógeno indica mala absorción de la fructosa.
Si tienes síntomas digestivos recurrentes, no esperes más. Reserva tu test y consulta hoy mismo para encontrar la mejor solución a tu problema intestinal.

Requisitos previos para realizar el Test de intolerancia de fructosa
Restricciones dietéticas previas al test
Consideraciones generales antes del Test de intolerancia lactosa en Córdoba
Ayuno de 8 a 12 horas: Debes estar en ayunas durante al menos 8 a 12 horas antes de la prueba, sin consumir alimentos ni bebidas, excepto agua.
Evitar ciertos medicamentos: Si estás tomando antibióticos, probióticos u otros medicamentos que puedan alterar la flora intestinal, es recomendable suspender su uso 2 semanas antes de la prueba. Consulta siempre a tu médico antes de hacerlo.
Evitar productos con fructosa: Durante al menos 24 horas antes de la prueba, no debes consumir alimentos o bebidas que contengan fructosa, como frutas (manzanas, peras, sandía), miel, algunos jugos, y productos procesados que la incluyan.
Evitar bebidas gaseosas y azúcares fermentables: El día previo a la prueba, evita el consumo de bebidas carbonatadas, chicles, alcohol y alimentos con alto contenido en fibra, ya que pueden interferir en los resultados de la prueba.
No fumar ni hacer ejercicio intenso antes de la prueba: Es importante evitar fumar y realizar ejercicio físico intenso 2 horas antes de la prueba, ya que estas actividades pueden afectar la medición del hidrógeno en el aliento.
Preguntas frecuentes sobre test de intolerancia a la fructosa
El test incluye una consulta presencial o consulta online mediante videollamada de 30 minutos para interpretar los resultados y, según estos, valorar el tratamiento que mejor se adapte al paciente.
Personas con sospecha clínica de este trastorno que presenten alguno(s) de los siguientes síntomas: dolor o hinchazón abdominal, gases, diarrea, náuseas o vómitos, ente otros, vinculados al consumo de alimentos ricos en fructosa (presente especialmente en multitud de frutas y verduras, miel…)
La intolerancia a la fructosa es un trastorno digestivo que ocurre cuando el cuerpo no puede absorber o procesar correctamente la fructosa, un azúcar presente en frutas, verduras y algunos productos procesados. Existen dos tipos principales: la intolerancia hereditaria, que es genética y afecta la capacidad del cuerpo para descomponer la fructosa, y la intolerancia malabsortiva, donde el intestino no absorbe adecuadamente la fructosa debido a una deficiencia en el transportador GLUT-5 o problemas intestinales como el síndrome del intestino irritable. Los síntomas más comunes incluyen hinchazón abdominal, gases, dolor estomacal y diarrea. El diagnóstico se realiza a través de un test de hidrógeno en el aliento, que mide la fermentación de la fructosa en el colon. El tratamiento principal consiste en evitar alimentos ricos en fructosa, ajustando la dieta según el tipo de intolerancia.
La intolerancia a la fructosa es un trastorno digestivo que impide la correcta absorción de este azúcar presente en frutas, miel, algunos vegetales y productos procesados. Cuando el intestino no puede digerir adecuadamente la fructosa, se generan síntomas digestivos molestos como:
✅ Hinchazón abdominal
✅ Gases y flatulencias
✅ Dolor o calambres estomacales
✅ Diarrea o estreñimiento
✅ Náuseas
Por ello es importante realizar cuanto antes un test de intolerancia a la fructosa en Córdoba, para comprobar tu salud.